En Mérida se pueden conseguir cosas interesantes, sorprendiéndonos y aprendiendo mucho. Desde siempre Aita (Papa en Vasco) nos hablaba de cuando el llego a Venezuela y se fue a Mérida (con 14 años) y que en Mérida se cultivaba el Trigo. La primera vez que fui en los años 80, vi esos círculos de piedra (era) donde trillaban el trigo, quitandoles la concha con el paso de los animales (caballos, bovinos u otros) para luego ser llevado al molino para hacer harina. Estos círculos de piedra que son como una especie de corrales de unos 6 metros de diámetro se encuentran (sus ruinas) en las montañas de todo el Estado Merida.
En agricultura, la era de trilla, es el terreno (normalmente circular y empedrado) donde se trillaban los cereales y posteriormente se aventaban para obtener el grano. Cuando aparecen agrupadas en un espacio colectivo, al conjunto se le denomina Ejido, quizás por ello así se llame la población Merideña.
Entre las cosas que me sorprendieron es que el Trigo quizas fue el primer producto que se exporto de Venezuela en forma comercial, en la Colonia, siendo la capital El Tocuyo, el 60% de las divisas del país correspondían a la exportación de trigo. El Tocuyo era conocido como la ciudad del trigo, se exportaba a México y Europa. Caracas se desarrolló con el aporte de 6 molinos de trigo, movidos por agua. El trigo de Caracas se exportaba a Cartagena.
El trigo en Venezuela se cultivaba desde la Colonia en siete estados del país. Primero en Aragua, Lara, Mérida y los Valles de Caracas. Luego, se extendió hacia otros estados del país y adquirió mayor importancia en los estados andinos, como Mérida, Táchira y Trujillo.
Cuando envié esta foto por wasap a todos mis contactos coloque equivocadamente que ahí se molía el trigo e inmediatamente mi compañero, colega y amigo el Medico veterinario Jose Gauta, tachirense que actualmente vive en Bailadores, me ilustro diciéndome que esa estructura es una ERA PARA TRILLAR, le di las gracias y envié la observación a todo el mundo.
En nuestra Venezuela conseguimos tesoros históricos que pocas personas aprecian y le dan el justo valor.